Expresidente ‘se cierra’ y defiende su derecho al silencio.
Martín Vizcarra se presentó este martes ante la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales del Congreso, convocado para responder por la Denuncia Constitucional N.° 424 interpuesta en su contra por la exfiscal de la Nación, Patricia Benavides.
Vizcarra está acusado, junto a la exministra de Justicia Ana Revilla, de presuntamente designar de manera irregular a Daniel Soria Luján como procurador general del Estado, un acto que habría vulnerado los requisitos legales.
Según la denuncia, la supuesta designación irregular contraviene los artículos 399 y 381 del Código Penal, que tipifican los delitos de negociación incompatible y nombramiento indebido.
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Al respecto, el vacado exmandatario justificó su negativa a declarar argumentando que ya renunció al antejuicio político, un mecanismo que protege a altos funcionarios públicos.
“Hemos renunciado a este derecho y no tiene sentido responder (a la comisión). Nos acogemos al derecho de guardar silencio a todas las preguntas”, afirmó.
El caso se centra en la presunta falta de trayectoria en defensa del Estado de Soria Luján, requisito fundamental para asumir el cargo.
Este detalle fue señalado como el núcleo del supuesto delito que involucra al ex jefe de Estado y a su entonces ministra de Justicia.
Antes de abandonar la sesión, Vizcarra expresó su desacuerdo con la citación: “Respeto al Congreso, pero no estoy de acuerdo con la decisión que han tomado. Si ya renuncié al antejuicio, ¿qué decisión tomarán si en caso deciden quitarme el antejuicio?”.
